Depresor de la transmisión refleja monosináptica y polisináptica en la médula espinal por estimulación de los receptores GABA sin afectar a la transmisión neuromuscular. Por vía oral atraviesa poco la BHE.
Vía oral: tratamiento sintomático de la espasticidad de origen cerebral, especialmente cuando esta es debida a parálisis cerebral infantil, así como tras accidentes cerebrovasculares o en presencia de neoplasias o de enfermedades degenerativas del cerebro. También está indicado para el tratamiento sintomático de los espasmos musculares que ocurren en enfermedades infecciosas de la médula espinal, enfermedades degenerativas, traumatismos o neoplasias, o aquellas de origen desconocido como esclerosis múltiple, parálisis espinal espástica, esclerosis lateral amiotrófica, siringomielia, mielitis transversa, paraplejia traumática o paraparesia y compresión de la médula espinal. En pacientes a partir de 0 años (A).
Vía intratecal: espasticidad crónica grave de origen cerebral o de origen espinal (asociada con una lesión, esclerosis múltiple u otras enfermedades de la médula espinal) que no responden a antiespásticos administrados por vía oral (incluido el baclofeno oral) o que no toleran las dosis orales eficaces en niños >4 años (A).
Vía oral: 0,75-2 mg/kg/día. El tratamiento debe iniciarse normalmente a dosis muy bajas (aproximadamente 0,3 mg/kg/día), preferiblemente dividido en 2 tomas. La dosis debe incrementarse con precaución a intervalos de 1 semana, hasta alcanzar la dosis suficiente para cubrir las necesidades individuales del niño.
Vía intratecal: uso solo por médicos con experiencia. Gran variabilidad individual. Realizar fase de prueba con bolo intratecal (PL o catéter intratecal) seguido de fase de determinación con dosis individual como paso previo a la de mantenimiento (infusión intratecal mediante sistema de liberación a través de bomba implantable).
En niños se debe iniciar con 25-50 µg/día e ir aumentando progresivamente a razón de 25 µg/día cada 24 h, hasta alcanzar una dosis máxima de 100 µg (si no es efectiva, el paciente debe desestimarse para este tipo de tratamiento). Posteriormente se ajusta la dosis de mantenimiento inicial según la duración del efecto de la dosis de prueba:
*No se recomienda su uso en <4 años.
Insuficiencia renal: precaución, puede ser necesario reducir la dosis.
Insuficiencia hepática: no se recomienda ajuste de dosis.
En muchos casos no se puede establecer una relación causal entre los efectos observados y la administración de baclofeno, ya que la mayoría de las reacciones adversas notificadas también pueden estar asociadas a la enfermedad subyacente. Sin embargo, algunas de las reacciones notificadas con frecuencia (somnolencia, vértigo, cefalea, náuseas, hipotensión, hipotonía) pueden estar relacionadas con el fármaco. Estas son en la mayoría de los casos transitorias y se producen fundamentalmente durante la fase de prueba o al cambiar las concentraciones.
Se describen solo las muy frecuentes (≥1/10) o frecuentes (>1/100, <1/10) o de relevancia clínica; para el resto, consultar ficha técnica.
Muy frecuentes: sedación, somnolencia, náuseas, hipotonía.
Frecuentes:
Excipientes: contiene almidón de trigo como excipiente, lo que habrá de tenerse en cuenta en los pacientes celiacos.
Fecha de actualización: noviembre de 2020.
La información disponible en cada una de las fichas del Pediamécum ha sido revisada por el Comité de Medicamentos de la Asociación Española de Pediatría y se sustenta en la bibliografía citada. Estas fichas no deben sustituir en ningún caso a las aprobadas para cada medicamento por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) o la Agencia Europea del Medicamento (EMA).
Etiquetas