Análogo de la vitamina D que actúa como regulador de los niveles de calcio y fósforo en el organismo. Ejerce su acción a través de su metabolito activo, tras la 25-hidroxilación llevada a cabo en el hígado, aumentando la absorción gastrointestinal de calcio y fósforo. Además, aumenta la reabsorción tubular de calcio y disminuye la excreción urinaria de fósforo por supresión de la PTH, jugando un papel importante en la resorción ósea.
La última actualización de las guías KDIGO (2017) sugiere que, en pacientes adultos con enfermedad renal crónica estadios 3a-5 que no están en diálisis, no se recomienda el uso rutinario de análogos de la vitamina D (grado de evidencia 2C). Recomienda reservar su uso para estadios avanzados (4-5) con hiperparatiroidismo grave y progresivo. En niños, el uso de análogos de calcitriol y vitamina D puede ser considerado para mantener los niveles de calcemia en el rango normal adecuado para la edad.
Vía oral:
Solución 2 µg/ml: 20 gotas equivalen a 1 ml, 1 gota equivale a 0,1 µg de alfacalcidol.
Dosis de mantenimiento habitual: 0,25-2 µg/día.
Vía intravenosa:
Debe administrarse en bolus (durante 30 segundos) en la línea de retorno de la máquina de hemodiálisis al final de cada sesión.
La dosis máxima recomendada es de 6 µg/sesión de diálisis, sin sobrepasar los 12 µg/semana.
Insuficiencia renal:
No precisa ajuste de dosis.
Insuficiencia hepática:
No hay ajuste de dosis proporcionado por el fabricante. No obstante, la solución oral contiene etanol, que hay que valorar en pacientes con enfermedad hepática.
Aquellos pacientes que precisen suplementos de calcio deben limitar la dosis a <500 mg/día de calcio elemento.
Es importante ajustar la dosis de acuerdo con las respuestas bioquímicas para evitar la hipercalcemia. Es necesario monitorizar regularmente los niveles séricos de calcio y fosfatos, valorando el producto calcio/fósforo; sus excreciones urinarias, la fosfatasa alcalina y la PTH, así como de exámenes oftalmológicos, radiográficos e histológicos, si es preciso. Su frecuencia dependerá de la presencia y magnitud de alteraciones, el grado de progresión de enfermedad renal crónica y el uso concomitante de otros tratamientos para la osteodistrofia renal.
En pacientes con enfermedad ósea renal o función renal gravemente reducida, pueden emplearse quelantes de fósforo simultáneamente con alfacalcidol, para prevenir el aumento de fósforo sérico y la calcificación metastásica potencial.
Las enfermedades granulomatosas, como la sarcoidosis o la tuberculosis, favorecen la hidroxilación, aumentando los niveles de vitamina D activa. El empleo concomitante de glucósidos cardiacos en presencia de hipercalcemia debida a la administración de vitamina D incrementa el riesgo de sufrir arritmias cardiacas.
El perfil de seguridad observado es similar en niños y en adultos.
La hipercalcemia puede ser rápidamente corregida mediante la interrupción del tratamiento (al menos una semana). Posteriormente puede reiniciarse el tratamiento, empleando la mitad de la dosis previa, con monitorización de los niveles de calcio.
Excipientes (pueden ser diferentes según presentación comercial; consultar ficha técnica específica): etanol anhidro (80 mg por ml), ácido cítrico monohidrato, citrato de sodio, propilenglicol y agua para preparaciones inyectables. Formulación oral: parahidroxibenzoato de metilo (E-218), sorbitol (E-420), hidroxiestearato de macrogolglicerol, toto-rac-α-tocoferol y agua purificada.
Advertencias sobre excipientes:
Conservación: conservar en nevera (entre 2 °C y 8 °C), con el embalaje exterior para protegerlas de la luz. Agitar bien antes de usar las presentaciones inyectables.
Presentaciones comerciales: las presentaciones disponibles en España pueden consultarse online en el Centro de Información de Medicamentos de la AEMPS (CIMA), http://www.aemps.gob.es/cima
La información disponible en cada una de las fichas del Pediamécum ha sido revisada por el Comité de Medicamentos de la Asociación Española de Pediatría y se sustenta en la bibliografía citada. Estas fichas no deben sustituir en ningún caso a las aprobadas para cada medicamento por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) o la Agencia Europea del Medicamento (EMA).